
El té de lavanda es conocido no solo por su aroma y sabor agradable sino también por sus beneficios para la salud, incluyendo su capacidad para ayudar a reducir la retención de líquidos y promover un estado de calma, lo que puede ser beneficioso para aquellos que buscan controlar su peso de manera efectiva. Aquí te explicamos cómo prepararlo.
Ingredientes
- 30 gramos de flores de lavanda
- 1 litro de agua
Modo de preparación
- Llevar el agua a ebullición.
- Añadir las flores de lavanda al agua hirviendo y apagar el fuego.
- Tapar y dejar reposar durante 5 a 10 minutos para que las flores liberen sus aceites esenciales y aromas.
- Colar el té para remover las flores y servir.
Recomendaciones de consumo
- Beber hasta 3 tazas de té de lavanda al día puede ayudarte a aprovechar sus propiedades diuréticas y calmantes.
Contraindicaciones
- El té de lavanda no es recomendable para niños ni para mujeres embarazadas debido a sus potentes efectos.
- Las personas con condiciones como úlceras estomacales deben evitar su consumo, ya que podría irritar más el estómago.
El té de lavanda puede ser un excelente aliado para relajarte después de un día estresante, ayudándote también a manejar la ansiedad que a menudo conduce a la ingesta compulsiva de alimentos. Su efecto diurético puede contribuir a la pérdida de peso al reducir la retención de líquidos. Como siempre, es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de empezar cualquier régimen nuevo que involucre hierbas medicinales, especialmente si ya estás tomando otros medicamentos o tienes condiciones de salud preexistentes.