La gastritis puede ser un problema incapacitante. Averigüemos los remedios naturales más efectivos y repasemos los consejos de la abuela.
Un problema bastante generalizado e incluso incapacitante, la gastritis es una inflamación del revestimiento del estómago que puede ser aguda o crónica. En el primer caso, el trastorno es transitorio y pasa a los pocos días, mientras que en el segundo acompaña la vida del individuo para siempre, aunque sea en períodos alternos. La gastritis aguda puede ocurrir por diversos factores y hábitos de vida incorrectos: desde la toma de medicamentos hasta infecciones bacterianas, pasando por el consumo de alcohol y el tabaquismo. Cabe destacar que este problema, sin embargo, puede evolucionar y agudizarse. Esta 'variante', además de actitudes reiteradas y nocivas como el hábito de beber, puede ser provocada por diversas enfermedades, desde enfermedades autoinmunes hasta tumores.
Los síntomas más comunes de la gastritis, tanto aguda como dañina, son: acidez estomacal más o menos intensa , que puede extenderse al esófago y la garganta, náuseas, vómitos y dolor o malestar en la parte superior del abdomen. Cuando el dolor no desaparece a los pocos días, es recomendable buscar el consejo de su médico. Sin embargo, existen remedios naturales efectivos que pueden ayudar a frenar las dolencias. En primer lugar, se recomienda dejar de fumar y beber alcohol, procurando llevar una dieta sana y ligera durante al menos unos meses.
Gastritis: remedios naturales efectivos
El primer aliado para combatir la gastritis es la buena vieja manzanilla . Con propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, es eficaz para combatir todos los problemas relacionados con el sistema gastrointestinal, incluida la gastritis. Consúmelo especialmente después de las comidas o, en todo caso, cuando sea necesario. Alternativamente, opta por la raíz de regaliz , que puedes consumir en forma de extracto seco o líquido. ¿Qué hay del jengibre entonces ? Con virtudes digestivas, antibacterianas y antiinflamatorias, es especialmente útil cuando el problema va acompañado de náuseas. Prepare una decocción y bébala según sea necesario.
La malva también es especialmente eficaz , tanto las flores como las hojas. Con una acción emoliente y calmante, ayuda a proteger la mucosa gástrica y reducir la inflamación. Si lo usas con manzanilla y regaliz, el efecto será mayor. Por último, no olvides otros aliados importantes: el jugo de aloe, las semillas de hinojo, la miel de manuka o de olmo y la arcilla verde ventilada.