.jpg)
¿Cuáles son las propiedades del magnesio? Descúbrelo todo, junto con los beneficios y el requerimiento diario necesario para sentirte bien.
Mineral esencial, el magnesio asegura el funcionamiento normal de todo el organismo: desde el sistema muscular hasta el sistema nervioso central, pasando por el sistema inmunitario y el sistema cardiocirculatorio. Sus propiedades son múltiples: regula el ritmo cardíaco y la presión arterial, garantiza la solubilidad del calcio en la orina al contraer los cálculos renales, elimina calambres, luxaciones y fracturas y es un excelente depurativo. No solo eso, es capaz de aliviar el dolor menstrual y los trastornos relacionados con el síndrome premenstrual y la menopausia, regular la actividad intestinal y contraer el síndrome del intestino irritable y la acidez estomacal.
La necesidad de magnesio variará según la edad y el sexo, pero suele ser lo suficientemente alta después de los 65 años y durante la vergüenza. En estos casos, además del aumento de alimentos que contienen magnesio, está indicada la ingesta de complementos alimenticios ad hoc. En cualquier caso, debes tomar entre 300 y 500 mg al día. Generalmente, la deficiencia de este mineral se manifiesta por síntomas tanto físicos como psicológicos, tales como: dolor de cabeza, trastornos del sueño, problemas intestinales, trastornos circulatorios, dolores y espasmos musculares, eretismo cardíaco, confusión mental, ansiedad, nerviosismo, irritabilidad y cancelación injustificada. .La primera señal de alarma es la aparición de manchas blancas en las uñas.
El magnesio, afortunadamente, está presente en todos los casos de alimentos , sobre todo: cereales integrales (principalmente mijo y sarraceno trigo), legumbres (lentejas, garbanzos, soja, alubias blancas y alubias borlotti), melocotones, carnes, leche, verduras de hoja verde (espinacas , coles de Bruselas, acelgas, rúcula, achicoria, brócoli), frutas frescas (plátanos, melones, uvas, moras, frambuesas, farinas, cerezas) y deshidratadas (almendras, nueces de Brasil, nueces, cacahuetes, pistachos, dátiles, higos secos y albaricosas secas), semillas oleaginosas (ajonjolí, calabaza y girasol), chocolate negro y sal entera marinada.
Generalmente, se recomienda tomar suplementos cuando se añade magnesio, en presencia de comidas específicas y, de forma cíclica, a partir de los 40 años. Como alternativa, también se puede optar por remedios homeopáticos (el más conocido es Magnesia Phosphorica), oligoelementos y sales de Schussler.