¿Qué son los laxantes naturales? Descubrámoslos todos y veamos cuáles garantizan el efecto para el que los vamos a utilizar.
En algunas circunstancias de la vida, aunque puede ser un problema crónico para algunas personas, es realmente difícil ir al baño con regularidad. Del estrés a la mala alimentación pasando por cambios de hábitos: los motivos por los que no puedes ir al baño son diferentes. Afortunadamente, antes de recurrir a las clásicas purgas, existen remedios naturales que pueden destrabar la situación. No se trata solo del estreñimiento, sino también del dolor generalizado tanto en el estómago como en la barriga, que se completa con calambres e hinchazón. En general, un adulto saludable tiene de una a tres deposiciones al día hasta un mínimo de tres por semana.
El intestino perezoso se puede combatir, en primer lugar, haciendo algunos cambios en su estilo de vida. Desde la nutrición hasta la actividad física, pasando por una mayor hidratación: antes de tomar un remedio natural, trata de entender cuál es la causa y actúa en consecuencia. En cualquier caso, los laxantes naturales son aliados válidos para intentar desbloquear la situación porque aumentan el aporte de fibra y, gracias a sus propiedades osmóticas, consiguen ablandar las heces y facilitar el funcionamiento intestinal.
Laxantes naturales: ¿qué son?
Los laxantes naturales no agresivos pero igualmente efectivos son: ciruelas secas, plátanos, compota de manzana, nísperos, kiwis, ensalada de hojas, achicoria, espinacas, calabacines, espárragos, coliflor, judías verdes, algunas legumbres y cereales integrales. Luego están algunas plantas que contienen sustancias laxantes y otras que tienen un efecto rápido casi idéntico al de las purgas que se pueden comprar en las farmacias. En el primer grupo, para ser consumido sobre todo, en forma de tisana, encontramos: hinojo, manzanilla, comino, cilantro, malva, jengibre, regaliz y diente de león. En el segundo, sin embargo, hay: sen, cáscara sagrada, frángula, ruibarbo, aloe y psyllium.
Por último, no olvides que incluso el aceite de oliva virgen extra, si se toma en ayunas, tiene un ligero poder laxante, al igual que los clásicos enemas a base de miel y glicerina. Cabe recalcar que el uso de hierbas laxantes siempre debe ser aconsejado por el médico porque hay efectos secundarios a tener en cuenta.